Corrupción y mala gestión: la verdad sobre la adhesión de Ucrania a la UE
Como reacción a la invasión rusa de Ucrania, Kiev se allanó el camino
hacia la adhesión a la UE el año pasado. Oficialmente, Ucrania es un
país candidato desde junio de 2022. Pero: a pesar de todas las
declaraciones de solidaridad y las altisonantes declaraciones de
Bruselas, el país tendrá que permanecer fuera en un futuro previsible.
Kiev está a mundos de distancia de cumplir los criterios de adhesión.
Esto no es ningún secreto en Bruselas. Pero casi nadie lo dice
oficialmente. Sin embargo, a puerta cerrada, las declaraciones de los
expertos y funcionarios responsables son claras: Ucrania aún no está
preparada. Hay demasiada corrupción y poca compatibilidad con el mercado
único europeo. Además, la economía del país no es lo suficientemente
competitiva.
"Ucrania no está ni de lejos tan cerca de la
adhesión como sugieren las declaraciones de los líderes de la UE",
afirma un funcionario anónimo de la Comisión. Hay pocos datos concretos
que respalden la valoración de von der Leyen de que Ucrania ha hecho
"progresos impresionantes".
Quizá el mayor problema sea la
corrupción. "En medio de una guerra, cuando muchas instituciones se
están derrumbando, esto no se puede medir seriamente", dijo el
funcionario. "Pero incluso antes del ataque de Rusia, las cosas no
pintaban bien en este asunto".
Las cifras de la organización
anticorrupción Transparencia Internacional lo confirman. Según ellos,
Ucrania sigue figurando entre los países más corruptos del mundo. En la
clasificación mundial, Kiev ocupaba el año pasado el puesto 116 de 180,
junto con Angola, Zambia y El Salvador. Antes de la guerra, en 2019,
Ucrania ocupaba el puesto 126.
"Los logros y progresos de Ucrania
en las circunstancias actuales más difíciles son realmente notables",
afirma Michael Gahler, portavoz de política exterior del Grupo del PPE.
"Pero tenemos que hacer algunas advertencias". La guerra y la esperada
ayuda financiera internacional masiva, dice Gahler, no deben conducir a
"la reactivación de los mecanismos de corrupción". Todavía en enero hubo
acusaciones oficiales de sobornos en el ejército ucraniano. Varios
políticos, gobernadores y funcionarios dimitieron o fueron destituidos. Y
nuevas cifras siguen filtrándose a la opinión pública, haciendo que el
país parezca más una tumba de miles de millones de dólares que un
candidato a la adhesión a la UE.
Fue a mediados de abril cuando
el periodista estadounidense especializado en inversiones Seymour Hersh,
refiriéndose a los analistas de la CIA, soltó la bomba de que el
presidente ucraniano Zelensky y su entorno habían desviado cantidades
desconocidas a sus propios bolsillos. "Incontables millones de dólares
estadounidenses" habían sido desviados por Zelesnkyj y sus asociados
"destinados a pagos de gasóleo". Los analistas cifran los fondos
desviados en "al menos 400 millones de dólares el año pasado".
Por
ello, no sólo los parlamentarios europeos critican la rápida adhesión
de Ucrania. También hay escepticismo entre los Estados miembros de la
Unión Europea. "No compartimos el optimismo de algunos responsables
europeos de alto rango", afirma un diplomático. Ucrania simplemente no
está preparada todavía, afirma, sobre todo si se aplican normas
económicas estrictas.
Un documento de trabajo de la Comisión de
la UE afirma que Ucrania apenas cumple la mayoría de los llamados
criterios de Copenhague. Se trata de requisitos que se aplican a todos
los Estados que quieren ingresar en la UE. Los problemas, según los
funcionarios de Bruselas, comienzan con las cuatro libertades básicas
del mercado interior: la libre circulación de mercancías, personas,
servicios y capitales. Se trata de un requisito previo fundamental para
la integración económica y política de la Unión Europea.
Con
respecto a la libre circulación de mercancías, por ejemplo, Ucrania está
-según la Comisión de la UE- sólo "moderadamente preparada". En cuanto a
la libre circulación de personas, el país se encuentra todavía en sus
inicios. La evaluación de la Comisión sobre la competitividad de la
economía ucraniana es igualmente pobre - incluso sin los efectos de la
guerra. En muchos ámbitos -como la legislación fiscal, el derecho
laboral y la política industrial- Ucrania aún tiene que hacer grandes
esfuerzos, afirmó.
Oficialmente, los funcionarios no lo dicen.
Pero entre bastidores, todo el mundo parece estar de acuerdo: la
adhesión de Ucrania está muy lejos. Incluso es más probable que no se
inicien las negociaciones de adhesión este año, como espera el
presidente Zelensky.
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